La Laguna de los Milagros
Muy cerca de Tingo María, a medio camino hacia Aucayacu, se encuentran el Caserío Los Milagros y la laguna que lleva el mismo nombre. Aunque éste es bastante reciente: algunos de los lugareños más viejos aún la conocen como “Laguna de Los Huayruros”, por la gran abundancia de árboles de esta especie, y se dice que era por esta razón que hace muchos años aún se veía con frecuencia a chamanes indígenas llegar hasta esta laguna para realizar diversas ceremonias.
La laguna, conformada por pequeños cursos de agua que crecen en la temporada de lluvias, no existiría sin las filtraciones del Cerro Belén, que junto con el espejo de agua conforma parte esencial no sólo del paisaje, sino del origen y base de todo el ecosistema de la zona: de allí la importancia de su conservación y cuidado.
En años recientes los lugareños han empezado hacerse conscientes de esto y a explotar el potencial turístico del lugar, donde han instalado pequeños restaurantes y se ofrecen paseos en bote y caminatas.
Sin embargo, la mayoría de habitantes del Caserío Los Milagros aún vive (o intenta vivir) de la agricultura, por lo que precisan asesoría y apoyo en cuanto a agricultura sostenible, y es con ellos especialmente con quienes queremos trabajar.
Creemos firmemente que las actividades turísticas no están necesariamente reñidas con las agrícolas, y que más bien hasta se pueden complementar si se organizan actividades de turismo vivencial.